Nos encontramos con un arcade de plataformas clásico (o no tanto) en 2D. Donde nos la pasaremos saltando juntando toons, esquivando enemigos, colgándonos de poleas, rebotando, etc. Los niveles son de una mediana duración (si es que no queremos hacer una speedrun) y tienen varios checkpoints con puertas desde las cuales no deberemos volver a empezar el mismo desde el principio si es que nos morimos. Rayman Origins tiene algo muy especial es que se puede jugar solo, con un compañero, con dos, o con tres más. Si no me equivoco es el primer arcade de plataformas en 2D que permite cuatro jugadores en simultáneo en la misma pantalla. Tanto Rayman como sus amigos cuentan con la posibilidad de agarrar corazones por el escenario para dar una chance más de no morir (es decir, si nos lastimamos sin un corazón nos morimos y a recomenzar desde el checkpoint pero, si tenemos un corazón, lo perderemos y seguiremos jugando desde ese lugar como si solamente hubiera sido un tropezón). La idea básica de los niveles es juntar toons (una especie de solcitos amarillos alegres), mientras más juntemos mejor nos irá el el nivel, y mejor desempeño tendremos en el mapa. Por lo general en cada nivel tenemos un medallón con 5 electoons para completar. Uno se logra automáticamente por terminar el nivel, dos por rescatar a los electoons rosas de las jaulas escondidas, otro por terminar el nivel en tiempo récord, y los otros dos por conseguir un número determinado de toons a lo largo del nivel. O sea, el nivel lo podés terminar de una forma, pero también podés tomarte el trabajo de encontrar todos los medallones necesarios para acumular más toons.
No sólo hay niveles de plataformas en 2D, también hay otros donde Rayman y sus amigos - salvo Globox - se suben a la espalda de un mosquito y van disparando por todo el nivel, como un shooter clásico en 2D. Disparando con un botón y con otros absorbiendo enemigos para poder lanzarlos luego (a otros enemigos). Estos niveles son muy divertidos y cortan bastante con la rutina de ir saltando por ahí en 2D. El universo del juego está dividido en varios escenarios diferentes, jungla, nieve, cuevas, nubes y un lugar parecido a una cocina mexinana (por raro que suene).
Para restaurar el orden deberá no sólo rescatar a los toons, sino vencer a diferentes bosses que en realidad son bichos inofensivos que han sido vueltos al lado oscuro, y no sólo eso, sino que habrá que ir a la tierra de los muertos vivos para poder lograrlo del todo.
Gráficos: maravillosos, una obra de arte en serio, ojalá otras compañías invirtieran en el engine para crear cosas maravillosas en 2D. La música: genial, la banda de sonido es muy buena. El control es excelente, alguna vez he sufrido de el temido "efecto buffer" pero nunca he terminado de enterarme si fue culpa mía o realmente fue el juego que me lo tomó así. He disfrutado (y también sufrido) muchísimo con este juego, pero no deja de ser una obra maestra. En Wii el control se hace con el Wiimote de costado (como en un Mario Kart), pero no deja de ser basante intuitivo finalmente cuando uno se acostumbra (responde igual de bien)
¿Qué es lo mejor del juego? Los gráficos, el diseño de los niveles y la posibilidad de jugarlo de a 4 simultáneamente en la misma consola (y en el mismo nivel, no me refiero a partiendo la pantalla).
¿Qué es lo peor del juego? Los últimos niveles son jodidamente difíciles. Los logros y trofeos solo se desbloquean para el primer jugador
En resumen, Rayman Origins es una joya del mundo del video juego, tal vez no conocida por todos. Ojalá que el Legends de Wii U le haga justicia como secuela.
Puntaje Final: 9.6/10
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